La deshidratación es una condición grave que puede afectar a cualquier persona, especialmente en actividades al aire libre como el camping o el senderismo. El calor extremo, la falta de líquidos y la sudoración excesiva pueden poner en riesgo nuestra salud si no tomamos las precauciones adecuadas. Sandiario te ayudará a entender qué es la deshidratación, cómo prevenirla, reconocer sus síntomas y actuar rápidamente si llegas a sufrirla. Además, te daremos algunos consejos prácticos para mantenerte hidratado y en buen estado durante tus aventuras al aire libre.
La falta de agua en el cuerpo o el cuerpo perdiendo mucha agua en un corto periodo de tiempo sin reponerla puede provocar deshidratación. La deshidratación es una condición grave que puede llevar incluso a la muerte, por lo que es necesario tomar acción de inmediato si notas algún síntoma.
La deshidratación grave puede ser resultado de un sobrecalentamiento y sudoración excesiva, de no consumir alimentos o líquidos que contengan agua, o de vómitos y diarrea prolongados. Es muy probable que la sudoración durante actividades intensas en climas calurosos, el ascenso a grandes alturas o caminatas fuera de los senderos provoquen deshidratación. Las personas mayores, los niños y los bebés son particularmente vulnerables a la deshidratación, que a menudo ocurre debido a una diarrea rápida y severa.
Precauciones
Para prevenir la deshidratación, es fundamental tomar suficientes líquidos para reponer los que se han perdido. Si el cuerpo pierde más del 10% de sus fluidos normales, es posible que empiece a dejar de funcionar correctamente. En estos casos, es necesario ir al hospital para recibir un suero intravenoso que reponga el agua y la sal, y restablezca el equilibrio natural de los fluidos corporales.
Cuando sudas mucho, no solo pierdes agua, sino también sal y varios oligoelementos, aunque en pequeñas cantidades. Al igual que el agua, la sal y los oligoelementos deben reponerse para que tu cuerpo siga funcionando bien.
En promedio, un adulto que camina o hace ejercicio varias horas al día en un clima templado necesita al menos 3 litros de líquidos. Sin embargo, si te encuentras en un clima caluroso, a gran altura o realizando trabajos físicos que causen mucha sudoración, necesitarás consumir entre 3 y 6 litros de líquidos. Si tomas menos de esta cantidad, corres el riesgo de deshidratarte.
Síntomas
El primer síntoma de deshidratación es la sed. En casos extremos, el no beber suficiente agua puede no saciarla. Otro síntoma temprano es el dolor de cabeza, causado por la constricción de los vasos sanguíneos del cerebro debido a la falta de agua. A veces pueden aparecer sensaciones de delirio.
También debes estar atento a que tu orina se vuelva más oscura y menos abundante. En las etapas finales de la deshidratación, sentirás letargo, inquietud y confusión sobre tu ubicación y lo que estás haciendo. Los calambres abdominales o musculares son muy comunes en estos casos.
Tratamiento
Si notas signos de deshidratación, busca un refugio o un lugar fresco de inmediato y bebe mucha agua hasta que la sed desaparezca. Si ves que alguien más tiene signos de deshidratación, llévalo a un lugar fresco y ofrécele agua o alguna bebida.
Lo que beba depende de dónde esté y de lo que tengas disponible. Aunque beber agua pura no es lo ideal, ya que se expulsa rápidamente del cuerpo, puedes añadir entre 20 y 25 ml de sal por litro de agua. Esta solución salina no solo ayuda a reponer el agua en el cuerpo, sino también a mantener el nivel adecuado de sal. Además de la solución salina o la solución de azúcar, la sal de rehidratación es una buena opción. Se puede conseguir en farmacias y debe mezclarse con agua antes de beberla. Otras alternativas incluyen bebidas isotónicas, geles de distintos sabores, bebidas carbonatadas sin azúcar, sopas claras o jugos de frutas diluidos. Estas bebidas son excelentes para la rehidratación, pero es importante evitar las que contienen cafeína, ya que tiene un efecto diurético que puede empeorar la deshidratación. Es necesario tomar al menos 200 ml de líquido cada hora y evitar alimentos sólidos durante las primeras 24 horas.
Antes de usar agua para mezclar las bebidas, asegúrate de que esté purificada y no esté contaminada. Si el agua está sucia, las bacterias pueden provocar vómitos y empeorar aún más la pérdida de líquidos.
Si una persona gravemente deshidratada no puede o se niega a beber líquidos, si la sed no disminuye después de tomar agua o si hay alguna complicación, es necesario buscar atención médica de inmediato.
Deshidratación severa
Si experimentas alguno de estos síntomas debido a la deshidratación, debes buscar ayuda médica de inmediato:
- Vómitos o diarrea
- Calambres musculares
- Pulso rápido y débil
- Dificultad para respirar
- Ojos hundidos
- Ojos secos, con menos lágrimas
- Arrugas en los dedos de manos y pies
- Boca seca
Deshidratación en niños
La diarrea en los niños puede causar deshidratación rápidamente. Siempre ofrece agua a un niño si está deshidratado, pero ten cuidado con la cantidad de sal: solo agrégale sal si el niño está gravemente deshidratado y busca ayuda médica de emergencia de inmediato. En el caso de los bebés, dales tanta agua como sea posible y busca atención médica sin demora.
Saciar la sed
- Si tienes una cantidad limitada de líquidos y necesitas calmar tu sed, sigue estos pasos para controlar la sed física. Esto te permitirá concentrarte mejor y ser más eficiente al buscar agua o líquidos potables.
- Mastica algo pequeño y suave, como chicle, nueces, guijarros o un trozo de cebolla cruda.
- Conserva los líquidos en tu cuerpo. Haz solo actividades apropiadas y planificadas para reducir la sudoración. Si hace calor, camina más despacio.
- Ajusta tu ropa. En climas calurosos, cubre tu piel con ropa para reducir la evaporación del sudor; en climas fríos, afloja o quítate algo de ropa para reducir la sudoración.
- Descansa o duerme tanto como puedas y busca un lugar con sombra si hace calor.
- Si no tienes agua potable, no comas nada; si hay poca agua, evita alimentos con proteínas, pero puedes comer frutas, dulces, galletas o algunas plantas.
- Si es posible, lávate las manos, la cara y el cuello con un paño empapado en agua de mar, orina o alcohol.
Vomitar
Si alguien vomita debido a la deshidratación, está gravemente enfermo y debe buscar atención médica. Si los vómitos se deben a otra causa, como indigestión, pero contribuyen a la deshidratación, el tratamiento adecuado puede controlar la condición. Haz que la persona beba agua a sorbos pequeños, en lugar de beber todo de una vez, ya que podría no tolerarlo.
Los niños que vomitan deben beber agua en pequeños sorbos (aproximadamente una cucharada) cada 10 a 20 minutos. Si los niveles de líquido siguen bajos, puedes aumentar gradualmente la cantidad de agua que toman.
Diarrea
La diarrea leve se caracteriza por la evacuación frecuente de heces finas y acuosas, mientras que la diarrea grave incluye calambres estomacales, fatiga, sed y heces que pueden tener sangre o mucosidad. Las causas comunes de diarrea incluyen intoxicación alimentaria, algunos medicamentos, estrés, consumo excesivo de alcohol e infecciones virales o bacterianas.
Las formas leves de diarrea son incómodas pero no peligrosas, ya que los líquidos perdidos pueden reponerse. Después de cada episodio, se recomienda que el paciente beba al menos dos vasos de agua para mantener los niveles de líquidos.
Si el paciente no tiene agua o se niega a beberla, puede sufrir deshidratación porque no se repone el líquido perdido. En este caso, es urgente llevarlo al hospital para restablecer el equilibrio de fluidos. Si la diarrea dura más de uno o dos días, es necesario buscar atención médica.
La deshidratación no debe tomarse a la ligera, y es fundamental estar preparado para prevenirla y tratarla de inmediato en caso de que ocurra. Con los consejos y recomendaciones de Sandiario, podrás estar mejor preparado para manejar situaciones en las que la hidratación sea clave para tu bienestar. Recuerda que mantener el cuerpo bien hidratado es esencial, sobre todo en actividades físicas intensas y en condiciones climáticas extremas. Siempre que salgas de aventura, lleva contigo suficientes líquidos, conoce los signos de deshidratación y actúa con rapidez para disfrutar de la naturaleza sin riesgos para tu salud.