Todo el mundo sabe caminar: no es una habilidad que debas aprender desde cero antes de salir, pero hay consejos y trucos que puedes aprender y que pueden ayudarte a evitar accidentes si caminas sobre superficies con baches, empinadas o resbaladizas, y reducir el estrés en piernas, pies y articulaciones. Desarrollar una zancada larga y elástica significa utilizar menos energía en cada zancada, lo que te da la energía para cubrir distancias más largas.
Caminata en equipo
Si viajas en grupo, especialmente si hay personas jóvenes o sin experiencia en el grupo, debes disponer de dos caminantes adultos con experiencia, uno al frente y otro atrás, para que el caminante más lento no se quede atrás.
Si el grupo supera las 10 personas, considera dividirse en grupos pequeños, porque caminar en un grupo largo con forma de serpiente durante varias horas es muy tedioso. Además, la plantilla debería ser más fácil de controlar. Asegúrate de que los miembros del equipo permanezcan juntos: deténganse y descansen al mismo tiempo y no se alejen demasiado de la ruta a pie.
El caminante líder al frente del grupo debe marcar el ritmo, que siempre debe estar en línea con el caminante más lento, pero manteniéndolo constante y continuo. Asegúrate de no dejar solo a alguien que camina muy lentamente. El resto del equipo deberá turnarse para hacerle compañía para animarle. Algunas personas nacen para caminar más rápido que otras, pero si la persona que está al frente de la fila está a cierta distancia por delante, debe detenerse y esperar a que los que están detrás la alcancen. La persona que va delante no debe ir demasiado lejos y debe permanecer a la vista de la persona que está detrás.
Esto es especialmente importante si no todos los miembros del grupo tienen un mapa y una brújula, ya que los que están detrás del grupo no podrán determinar la ruta a seguir. El líder también puede actuar como explorador, observando obstáculos o peligros potenciales en cualquier momento y encontrando la mejor ruta para sortearlos.
El equipo debe preocuparse de que la persona más lenta no se quede atrás, y la persona más lenta debe tratar de mantener un ritmo constante. De lo contrario, si el caminante lento comienza a perder el tiempo o sigue pidiendo detenerse y descansar, todo el grupo se frustrará e impacientará. Una caminata así no tiene éxito.
Eficiencia al caminar
Existe una forma importante de mejorar en gran medida la eficiencia al caminar, que ahorra trabajo y es segura, y es dar pasos largos. Si mueves las caderas en lugar de las rodillas, tu zancada será más lenta pero también más larga, y podrás apoyar el pie con cuidado y precisión.
Cada paso consume la misma cantidad de energía. Si la longitud de la zancada es de 90 cm en lugar de 60 cm, puedes caminar más consumiendo la misma cantidad de energía. Es una buena idea practicar zancadas largas caminando todos los días y te acostumbrarás a ellas con el tiempo.
Cuesta arriba y cuesta abajo
Al caminar cuesta arriba, tus pasos deben ser más cortos de lo habitual y el centro de gravedad de tu cuerpo debe estar hacia adelante, pero trata de mantener el mismo ritmo de marcha que en terreno llano. También usa pasos cortos cuando camines cuesta abajo y dobla ligeramente las rodillas para llevar el centro de gravedad de tu cuerpo hacia atrás, de modo que la energía gravitacional hacia abajo sea absorbida por los músculos de los muslos en lugar de las rodillas. Al bajar de la montaña, la presión sobre las rodillas es relativamente alta, especialmente si la mochila es pesada, por lo que es posible que tengas que detenerte y descansar más para reducir la fatiga de las piernas. Para ascensos o descensos pronunciados, es mucho más fácil seguir el enfoque en zigzag.
Terreno difícil
Si la pendiente contiene arena, nieve o material suelto como grava, camina en diagonal al subir o bajar la pendiente. Ten mucho cuidado si tu descenso es sobre hierba mojada, rocas o terreno suelto, donde incluso las botas de montaña resistentes pueden resbalar. Evita caminar sobre rocas o cantos rodados grandes y sueltos, ya que pueden rodar hacia abajo en cualquier momento. Los bastones para caminar pueden ayudarte a mantener el equilibrio en terrenos irregulares.
En nieve plana, puede resultar más fácil esquiar hacia adelante. En nieve abierta, los equipos deben alinearse en una sola fila, con los miembros del equipo a poca distancia entre sí. De esa manera, incluso si una avalancha repentina bloquea tu vista, sabrás dónde están los demás. En caso de una avalancha muy grave, suele ser más seguro detenerse y buscar refugio, pero si hay que seguir adelante, todos deben poner una mano en el hombro de la persona que está delante.
Piensa más y ve más
Incluso si estás siguiendo un sendero, observa más de cerca las características circundantes, como lagos, ríos o bosques. Saca un mapa para verificar que las características coincidan y asegúrate de que estás en el camino correcto y en la dirección correcta. Si no estás seguro de ir en la dirección correcta, utiliza una brújula para comprobarlo.
En áreas potencialmente peligrosas, como pantanos, arroyos o rocas inestables, algunos miembros del grupo pueden tener dificultades. En este momento, siempre debes mirar a tu alrededor para encontrar la ruta más fácil. Al subir por un sendero de montaña, estate siempre preparado para descender un poco para encontrar una ruta más segura para subir la montaña. No utilices un arroyo o río como ruta de descenso si no puedes verlo a la vista, ya que el agua siempre seguirá un atajo, a veces corriendo por paredes de roca. Asimismo, al descender, asegúrate de tener una vista completa de las pistas, ya que algunas pistas conducen directamente a la pared rocosa.
Etiqueta del campo
Si practicas senderismo por el campo, especialmente en grupo, debes cuidar el medio ambiente y respetar a la gente local o al resto de viajeros.
- Cede el paso a otras personas que caminan, andan en bicicleta o montan a caballo.
- Llévate la basura.
- Si viajas por una granja donde crecen cultivos o pasta ganado, sigue los senderos del campo, cierra la puerta detrás de ti y no toques ni asustes intencionalmente al ganado. Si viajas con un perro, mantenlo atado y no permitas que se acerque ni moleste al ganado.
- Si tienes que caminar por una calle con automóviles, camina de cara al tráfico que viene en sentido contrario. Sin embargo, si te acercas a una curva cerrada, es mejor caminar por el exterior de la curva para que los vehículos que vienen en sentido contrario puedan verte más fácilmente. Ten extrema precaución al acercarte a puntos ciegos en la carretera.
Caminar en la naturaleza es una experiencia enriquecedora que ofrece tanto desafíos como recompensas. Siguiendo estos consejos y trucos de Sandiario, puedes asegurarte de tener una caminata segura y agradable, ya sea que estés subiendo una colina empinada, navegando por terrenos difíciles o disfrutando de una caminata en grupo. Recuerda siempre respetar el entorno y a las personas que encuentres en tu camino. Con práctica y preparación, cada paso que des te llevará a descubrir nuevos paisajes y a vivir aventuras inolvidables. ¡Así que ata bien tus botas, prepara tu mochila y sal a explorar!