Cuando sales de campamento, una buena comida te puede levantar el ánimo y darte la energía que necesitas para seguirle. Pero no se trata de cargar con toda la cocina del hogar. Aquí en Sandiario te voy a contar qué utensilios sí valen la pena llevar, cuáles te sacan del apuro en plena naturaleza y cómo armar tu kit de cocina para que no te falte lo esencial, sin romperte la espalda en el intento.
Cuando te vas de campamento o a una aventura en la naturaleza, no puedes cargar con toda la cocina encima. Lo ideal es llevar utensilios ligeros, prácticos y que te saquen del apuro en distintas situaciones.
El recipiente todo terreno
Busca un recipiente plegable, que ahorre espacio y tenga varias funciones. De preferencia, que tenga agarradera y que el material aguante el fuego directo. Así, puedes usarlo para lavar alimentos, hervir agua, cocinar arroz o guardar la comida ya preparada. Si tiene agarradera, será mucho más fácil manipularlo sin que se te resbale. Después de comer, también lo puedes usar para guardar agua y lavarte la cara.

El infaltable: el fogón
El fuego lo es todo en el campamento: te da calor y cocina tu comida. Pero allá afuera no siempre hay leña o materiales para encenderlo, así que lo mejor es llevar una estufita portátil y su respectivo combustible. Hay tres tipos principales de combustible, cada uno con lo suyo:
- Gasolina: Tiene una flama potente y es barata. Ideal si te vas por varios días. Pero es pesada y difícil de prender porque necesita calentarse antes. También ocupa bastante oxígeno, así que vas a tener que bombear aire al fogón de vez en cuando.
- Gas: Es más ligero que la gasolina y viene enlatado a presión, lo que lo hace más seguro. Pero si estás en lugares muy altos, la presión baja y puede haber fugas. Así que en zonas de altura, mejor evítalo.
- Alcohol: Es el más barato y fácil de usar, sea en forma líquida o sólida. Ideal en climas fríos. El único pero es que no da tanta potencia y se acaba más rápido, así que necesitas llevar más cantidad.
Antes de salir, piensa bien en las condiciones del lugar adonde vas y escoge el combustible que mejor se adapte. Si no te decides, puedes llevar un poco de cada uno, pero ojo: eso pesa más y no todos los fogones sirven con todos los combustibles.





Utensilios para cocinar en campo
Cuando vas de mochilazo o acampada ligera, lo mejor es llevar lo mínimo indispensable. Eso sí, hay que aceptar que la comida será simple, nada gourmet. Pero si vas a montar un campamento base más estable, sí puedes darte el lujo de cocinar algo más sabroso. Para eso, necesitas llevar los utensilios adecuados.
Campamento ligero
Si vas a pie cargando todo en tu mochila, lo básico es:
- Comida que no pese mucho: Lo importante es que te dé energía, no que sepa a gloria. Lleva enlatados, comida al vacío, o alimentos deshidratados.
- Un set de ollas o platos tipo militar: De aluminio, ligeritos, y que puedas usar tanto para comer como para cocinar. Si son plegables, mejor.
- Abrelatas: Si llevas latas, no se te puede olvidar. Una navaja suiza también puede sacarte del apuro; sirve como cuchillo, abrelatas y más.
Si vas a estar fuera varios días, entonces sí conviene llevar unos cuantos utensilios más decentes, parecidos a los de cocina casera.
Campamento base
Cuando un grupo va a quedarse varios días en un mismo lugar, se arma un campamento base. Ahí sí vale la pena cargar más cosas porque ya no hay que andar moviéndolas seguido. Puedes llevar más utensilios de cocina para preparar comidas completas.
Eso sí, los utensilios deben combinar con el tipo de fogón o estufa que uses. No tiene caso llevar una olla gigante si tu fogón no puede con ella.
Las ollas para cocer
La olla que lleves depende de cuántas personas haya en tu equipo. Hay ollas grandes que aguantan entre 9 y 13 litros, ideales si cocinas para varios. Siempre mantenlas bien limpias, por dentro y por fuera. Y cuando la uses, no olvides taparla: así ahorras tiempo y combustible al cocinar.
Si vas a cocinar directo al fuego, cuida que la olla no sea muy delgada, porque se puede deformar o quemar. Las ollas delgadas van mejor sobre un fogón. En cambio, para freír necesitas sartenes más gruesos, que aguanten temperaturas altas sin doblarse.
Otras cosas que te salvan la vida en la cocina del campamento
Si te va a tocar cocinarle a mucha banda, estos utensilios te harán la vida más fácil:
- Cucharas de madera de diferentes tamaños: Úsalas para cocinar. Eso sí, evita las que están hechas de aserrín prensado, porque pueden guardar bacterias.
- Cucharas grandes para servir: Lleva unas 2 o 3.
- Espumaderas o cucharones con agujeros: Para sacar cosas del agua o caldos.
- Cuchillos variados: Incluye uno con sierra. Asegúrate de que todos estén bien afilados. Solo úsalos para preparar comida.
- Espátula para pescado o cosas planas: Ideal para voltear o sacar alimentos sin romperlos.
- Cucharones de diferentes tamaños: Para servir sopas o caldos.
- Pelador y machacador de papas: También sirven para otras verduras como col.
- Batidor manual: Para mezclar ingredientes o preparar aderezos.
- Abrelatas: Infaltable si llevas latas.
- Colador: Sirve para escurrir pastas, verduras o lo que necesites.
- Condimentos: Sal, azúcar, chile en polvo, y algunos básicos como kétchup o mostaza.





Recipientes para el agua
Cuando vas de mochilazo, lo normal es no cargar con mucha agua, porque pesa un chorro. Lo más práctico es ir encontrando fuentes de agua limpia en el camino. Peeero, si vas en coche o piensas quedarte en un mismo lugar por varios días, o si vas a zonas muy alejadas, lo mejor es llevar tu propia reserva de agua potable.
Para eso, lo ideal son tambos de plástico duro. Aguantan los golpes y no se oxidan. ¡Ojo! No uses los mismos que alguna vez sirvieron para guardar gasolina o combustibles.

Tazas medidoras
Las hay de varios tamaños. Si vas en grupo, lleva una grande y unas cuantas medianas y chicas. Te ayudan a no pasarte de sal, arroz, agua o lo que sea. Todo queda más parejo y sin desperdiciar.
Tablas para picar
Muy importante separar alimentos. Lo mejor es usar una tabla diferente para cada tipo de comida: carne, pescado, verduras, pan, etc. Si puedes, usa tablas de plástico de distintos colores para no confundirlas. Por ejemplo:
- Roja para carnes
- Azul para pescado
- Verde para verduras
Así evitas la contaminación cruzada y te ahorras una intoxicación innecesaria.
Guantes resistentes al calor
Si vas a mover ollas calientes o sacar algo del fuego directo, ¡no te arriesgues! Lleva unos guantes resistentes al calor. Tus manos te lo van a agradecer.
Platos y cubiertos
Vas a necesitar platos y cubiertos de diferentes tamaños. Pueden ser de plástico o de metal. El plástico es más ligero, pero ni se te ocurra ponerlo cerca del fuego porque se derrite. El metal dura más y aguanta el calor, pero pesa un poco más.
Cocinar en la naturaleza no tiene por qué ser un caos ni un lujo. Con el equipo adecuado, puedes preparar comida decente, calentita y segura, ya sea que vayas de mochilazo o armes un campamento base con más comodidades. Lo importante es planear con cabeza, llevar solo lo necesario y adaptar tus herramientas al tipo de aventura que vas a tener. ¡Y recuerda! Comer bien en el campo no solo alimenta el cuerpo, también levanta el ánimo.