Cuando acampas, la comida es un elemento clave para mantener la energía y disfrutar de la experiencia al máximo. Ya sea que estés en un campamento base por varios días o en un campamento de larga duración, tener una buena organización y saber qué cocinar puede hacer toda la diferencia. En Sandiario, te compartimos algunos consejos prácticos para mantener la comida caliente, mantener la higiene en el campamento y organizar las tareas de cocina de manera eficiente. Además, te damos ideas para preparar comidas nutritivas y deliciosas que te ayudarán a recargar energías para tus aventuras.
En comparación con un campamento ligero, en un campamento base o de larga duración puedes preparar una mayor variedad de alimentos. Aquí podrás tener más estufas, más utensilios de cocina y más ingredientes y condimentos. Además, tendrás un acceso más fácil a alimentos frescos. Si llevas tu equipo en un auto, el peso no es un gran problema, por lo que la comida enlatada, aunque pesada, es conveniente.
El tipo de comidas que prepares dependerá principalmente de tu ubicación y de lo que tengas planeado para el día. Por ejemplo, si la mayoría sale del campamento ese día, el desayuno debería ser más sustancioso y nutritivo que el almuerzo, en caso de que también se planifique.
Desayuno
Quizá no quieras un desayuno caliente cuando hace calor, sobre todo si el campamento ofrece un almuerzo abundante. Pero, por otro lado, si estás en un lugar cálido o frío, o si vas a estar en actividad física todo el día, puede que prefieras un desayuno caliente con varios productos. Lo ideal es comenzar con una papilla de frutas o cereales, muesli o avena. Luego, podrías incluir algo hervido, como tocino y huevos, acompañado de pan y mermelada o miel. Intenta acompañar el desayuno (y las demás comidas) con jugo, té, café o chocolate caliente, ya que hacen la comida más saludable y te aportan más líquidos.
Almuerzo
El almuerzo suele ser la comida más ligera del día, pero quienes regresan al campamento base después de una mañana de actividad pueden llegar con mucha hambre. Por eso, el almuerzo debe ser sencillo, rápido y nutritivo. Sopas, sándwiches y una bebida fría o caliente serían una excelente combinación. Lo ideal es que también incluya algo de fruta fresca, si tienes acceso a ella.
Cena
La cena suele ser la comida principal del día. Después de un día agotador, es buena idea disfrutar una cena de tres tiempos con calma.
La sopa suele ser el primer plato. Si usas sopa en polvo, puedes agregarle algunas verduras frescas, si las tienes, para hacerla más nutritiva y mejorar su sabor.
El segundo tiempo es la comida fuerte, normalmente algún tipo de carne o pescado con arroz, papas o pasta y algunas verduras frescas. La manera más sencilla de cocinar carne o pescado en el campamento es guisarlo, sobre todo cuando estás preparando comida para muchas personas que no comen al mismo tiempo.
Para evitar que la comida del campamento se vuelva aburrida, acuérdate de agregar algunos condimentos picantes u otras especias para darle más sabor. Por ejemplo, puedes hacer un guiso al curry, picante o incluso agridulce, según el gusto de cada quien. Pero ten cuidado de no hacer la comida demasiado picante, porque puede que algunos no la disfruten. Si notas que a algunos les gustan los condimentos picantes y a otros no, puedes preparar el plato en dos tandas: una picante y otra no, o simplemente hacerlo suave y que cada quien le ponga los condimentos que quiera.
Siempre que tengas los ingredientes y las habilidades culinarias, podrás preparar una variedad de postres. Si decides usar postres instantáneos, como pudín, puedes agregar fruta fresca o enlatada para realzar el sabor.
Mantener la comida caliente
Uno de los mayores retos al cocinar para varias personas es repartir la comida cuando está caliente, pero no hirviendo. Una opción es poner una olla grande con agua a fuego lento sobre la fogata o estufa y colocar un plato grande encima. Cuando la comida esté lista, colócala en ese plato y tapa la olla. Asegúrate de mantener un fuego suave para que la comida se mantenga caliente sin que se queme o se seque el agua de la olla. Luego, puedes usar esa misma agua para lavar los platos.
Si tienes que preparar alimentos como huevos fritos y solo puedes freír seis o siete a la vez, haz que vayan por ellos en cuanto estén listos. Así, los que comen tendrán sus huevos calientes y nadie tendrá que esperar tanto, porque si no, la comida se enfría para la otra mitad del grupo.
Limpieza e higiene
No bajes tus estándares de higiene solo porque estás cocinando y comiendo al aire libre. En el campamento base, no te quedes con el mismo plato o tazón para cada comida sin lavarlo. Si no tienes suficientes, lávalos rápidamente entre platillos.
Establece reglas claras para mantener las superficies donde distribuyes y comes los alimentos limpias y sin restos de comida o sopa.
Cocinar huevos
A pesar de ser un poco delicados y necesitar un buen empaque cuando los transportas, los huevos son perfectos para acampar: populares, versátiles, nutritivos, baratos y fáciles de preparar. Además de freírlos, hervirlos y revolverlos, puedes ponerlos en papas y hornearlos en el fuego, o añadirlos a una sopa caliente al estilo asiático.
Comparte el trabajo en la cocina
En campamentos base grandes, es buena idea que una o dos personas se encarguen de planear y preparar los alimentos. Esto facilita controlar cómo se usan las reservas y evita que todos se pregunten quién va a cocinar. Pero, de todas formas, todos deben ayudar en la preparación de los ingredientes, cuidar las ollas, encender la fogata, echar leña, repartir la comida y limpiar después de comer. Lo ideal es organizarse por turnos para que siempre haya ayuda disponible y no haya tantas personas en la cocina mientras estás ocupado cocinando.
Además del cocinero designado, es recomendable que todos en el grupo tengan habilidades culinarias. Puede que alguien sea experto en cocinar pescado, hacer pan o preparar un curry, y se encargue de un platillo en específico o incluso de toda la comida. Pero asegúrate de que no use todos los ingredientes, como el limón o el queso, en una sola comida. Insiste en que el cocinero te muestre su plan de cocina para evitar conflictos con las comidas o con los planes del día.
Cocinar al aire libre puede ser todo un reto, pero con una buena planificación y colaboración del grupo, también puede ser una experiencia divertida y gratificante. No olvides mantener la comida caliente, organizar turnos en la cocina y, sobre todo, disfrutar cada comida como parte de la experiencia de camping. Con estos consejos de Sandiario, estarás listo para preparar comidas increíbles en tu próxima aventura al aire libre.