Sobrevivir en la naturaleza no es solo cuestión de suerte: es cuestión de preparación. Ya sea que te pierdas en la sierra, estés en medio de una emergencia o formes parte de una misión, contar con un buen plan de supervivencia puede marcar la diferencia entre regresar a casa o quedarte en el intento. En Sandiario te contamos lo que sí o sí necesitas saber para sobrevivir en condiciones extremas, sin importar dónde te toque estar.
Un plan de supervivencia no es lo mismo que una misión específica. Mientras que una misión gira en torno a un objetivo concreto, un plan de supervivencia tiene que adaptarse al entorno real donde te encuentres. Su objetivo es ayudarte a superar todos los obstáculos que se te puedan presentar. Y para lograrlo, hay ciertos elementos que no pueden faltarte:
Refugio
Si te agarra el mal clima —frío, lluvia, viento o hasta nieve— lo primero es encontrar o construir un refugio decente. Necesitas un lugar donde puedas hacer fuego para calentarte y protegerte del clima extremo. También es vital que ese refugio te mantenga a salvo de cualquier amenaza, incluyendo enemigos.
Un buen ejemplo son las madrigueras abandonadas por animales. A veces, si la situación es urgente y no llevas tienda de campaña, usar una cueva o agujero dejado por algún animal puede ser la solución ideal. Claro, asegúrate bien de que ya no viva nadie ahí. No querrás que un oso o un lobo regrese y te encuentres con un problema más grande.
Comida y agua
Sin agua, el cuerpo no aguanta más de una semana, así que lo primero que debes hacer al llegar a un lugar desconocido es buscar una fuente de agua. Hay varias formas de hacerlo: seguir huellas de animales suele llevarte a un manantial o río; también puedes obtener algo de agua de ciertas plantas.
La comida también es crucial, aunque va después del agua en la lista de prioridades. Comer te da la energía que necesitas para seguir adelante. Pero en la naturaleza no vas a encontrar comida lista para servir, así que tienes que aprender a distinguir qué plantas o frutos se pueden comer y cuáles son veneno puro. Si vas a cazar animales, necesitas saber cómo hacer trampas o lazos. Un buen plan de supervivencia te ayuda a conseguir comida más rápido y a recuperar fuerzas sin poner en riesgo tu vida.
Botiquín de primeros auxilios
Estando en la intemperie, las posibilidades de enfermarte o lastimarte se disparan. Vivimos acostumbrados a la comodidad y protección de la vida moderna, pero allá afuera todo cambia. Comer un hongo venenoso puede ser un pequeño error en la ciudad, pero en la naturaleza ese mismo error te puede costar la vida si no estás preparado.

Peor aún, en el campo no hay hospitales ni farmacias. No puedes cargar con todo un equipo médico, y hasta unas cuantas medicinas pueden volverse un estorbo. Por eso es tan importante saber cómo usar lo que el entorno te da para curarte o atender emergencias. Un botiquín básico y conocimientos de primeros auxilios pueden marcar la diferencia entre vivir o no.
Señales
Muchas veces, perderte en el campo no es algo que planeaste. A lo mejor te separaste de tu grupo o perdiste comunicación con tu equipo. Mientras tú estás tratando de sobrevivir, también puede haber gente buscándote. Pero si no sabes cómo enviar señales, cómo interpretarlas o cómo usar el equipo que tengas, podrías perder esa oportunidad de ser rescatado. Y cuanto más tiempo pases aislado, más peligro corres.
Eso sí, ten cuidado. Si no sabes bien cómo usar las señales, podrías atraer la atención equivocada, como enemigos o hasta drones de reconocimiento. Por eso, aprender a comunicarte con señales es algo básico si vas a salir a misiones o explorar terrenos desconocidos.
Tienes que adaptar tu plan de supervivencia al entorno y a las necesidades del momento. Sin estas herramientas básicas —refugio, comida y agua, primeros auxilios y señales— sobrevivir en el campo es como querer que una planta crezca sin tierra: simplemente no va a pasar.
Sobrevivir en el campo no se trata de ser el más fuerte, sino el más listo. Tener refugio, agua, comida, conocimientos de primeros auxilios y saber usar señales puede sacarte de los peores apuros. No esperes a estar en problemas para aprender esto. Prepárate, mantén la calma y recuerda que en la naturaleza, quien se adapta, vive.