El equipo para acampar generalmente es costoso y está estrechamente relacionado con tu seguridad personal, por lo que debes cuidarlo si quieres que funcione bien. Después de regresar del viaje, mientras tengas la memoria clara y sepas dónde hay algún desperfecto o problema, realiza reparaciones integrales de inmediato. Limpia, seca y repara tu equipo antes de guardarlo y prepararlo para tu próximo viaje.
Carpa
No te apresures a guardar la tienda después de regresar del viaje. Primero, comprueba si falta alguna pieza y si todo está intacto. Si la tienda está hecha de material sintético y las costuras no están selladas, aplica sellador a las costuras (disponible en tiendas de exteriores) y déjala secar antes de guardarla. Si la tienda tiene un mosquitero en el interior, revisa si hay agujeros y repáralos si los hay. No esperes hasta que entren los mosquitos para descubrir que hay un problema.
Cocina
Un horno mal mantenido no sólo es ineficiente, sino que también puede ser peligroso. Si crees que hay un problema con tu estufa, no la uses. Si necesitas reemplazar piezas de tu horno, utiliza únicamente piezas originales del fabricante. No almacenes una estufa durante largos períodos de tiempo con un tanque de combustible sin usar o con un recipiente sin usar adjunto. Vacía el combustible o retira el bidón de combustible y guarda la estufa por separado.
Equipos con componentes electrónicos
La brújula debe colocarse alejada de campos magnéticos, como planchas o altavoces de radio. Si se trata de una brújula graduada (montada sobre una base de plástico transparente de un saco de dormir), asegúrate de que la base esté limpia para que las graduaciones se puedan ver claramente. Para los dispositivos que usan baterías, si no se usan durante un período prolongado, se deben quitar las baterías; de lo contrario, las baterías tendrán fugas y corroerán el dispositivo.
Mochila
Al utilizarla, no arrojes ni arrastres la mochila con su contenido, y no la cargues únicamente por sus correas. Cuando llegues a casa después de tu viaje, vacía tu mochila, límpiala por dentro y por fuera con un paño húmedo y revisa las costuras en busca de rasgaduras o daños. Asegúrate de que esté seca antes de guardarla. Si la mochila está muy sucia, lávala con agua y jabón, no con detergente, ya que destruirá las propiedades impermeables del tejido. Las mochilas deben guardarse en un área seca y bien ventilada.
Bolsa de dormir
A excepción de los sacos de dormir de terciopelo, todos los sacos de dormir requieren una limpieza cuidadosa y un largo tiempo para secarse por completo. Si tu saco de dormir ha sido limpiado, secado y almacenado, déjalo ventilar durante al menos medio día antes del próximo uso para disipar los olores químicos. Si utilizas una lavadora para lavarlo, colócalo en un lugar plano para que se seque, porque secarlo en un tendedero dañará la estructura del saco de dormir. Si utilizas un forro de saco de dormir, ya sea de algodón o seda, límpialo según las instrucciones del fabricante después de cada viaje.
Relleno de plumas o plumón
En el caso de los sacos de dormir rellenos de plumas o plumón, lo más seguro es llevarlos a la tintorería y limpiarlos del mismo modo que una colcha de plumón. Si deseas lavarlo tú mismo, compra un detergente especial para plumones y colócalo sobre una superficie plana para que se seque después del lavado. Durante el proceso de secado, rompe los grumos. Cuando esté casi seco, agita el saco de dormir para distribuir uniformemente el plumón. Una vez que el saco de dormir de plumón esté completamente seco, cuélgalo en un lugar cálido y seco.
Rellenos sintéticos
Las bolsas llenas de materiales sintéticos deben lavarse a mano sin detergente, dejarse secar lentamente en un área bien ventilada o secarse en secadora a fuego lento.
Relleno de terciopelo
Las bolsas de dormir rellenas de terciopelo son las más fáciles de limpiar. Simplemente lávalas en la lavadora y cuélgalas en el tendedero para que se sequen. Ten en cuenta que se debe utilizar detergente en polvo en lugar de detergentes comunes. Los sacos de dormir de terciopelo se secan muy rápidamente.
Zapatos
Como uno de los equipos de viaje más importantes y costosos, los zapatos deben cuidarse con mucho esmero, tanto durante el viaje como después de regresar a casa.
Durante el viaje
Cuando te quites los zapatos todas las noches, agítalos bien y golpéalos con fuerza para quitar el barro suelto. Usa un cuchillo para quitar el barro de las suelas de tus zapatos. Mantén tus zapatos lo más secos posible; llénalos con periódicos arrugados y déjalos junto a la puerta de la tienda durante la noche, o cuélgalos afuera si no llueve. No seques tus zapatos cerca del fuego o bajo la luz solar intensa, ya que esto puede dañar la parte superior.
Después de regresar a casa
Primero quita todo el barro y la suciedad de los zapatos, luego lávalos con agua tibia y jabón y déjalos secar al aire. Es necesario volver a impermeabilizar la parte superior de todos los zapatos antes del próximo uso. Si no lustras tus zapatos de cuero regularmente con betún o cera, eventualmente el cuero se secará y se agrietará. Si tus botas o zapatos son de cuero, aplica un par de capas de película protectora antes de guardarlos, como cera suavizante de cuero, betún o algún producto recomendado por el fabricante. Si tus botas o zapatos están hechos de tela, usa un producto a base de silicona que pueda rociarse o frotarse en la parte superior.
Cuidar botas o zapatos
- Coloca las botas en cada mano y golpéalas para quitar el barro o la suciedad suelta.
- Usa un cuchillo o un pequeño palo de madera para quitar el barro o la suciedad de las suelas de los zapatos.
- Dale a cada zapato un cepillado completo con un cepillo de cerdas duras para eliminar cualquier resto de barro, polvo o suciedad.
- Comprueba el desgaste de los cordones y reemplázalos si es necesario. Lava tus botas con agua tibia y jabón.
- Usa tus dedos o un paño suave para aplicar el agente impermeabilizante a base de aceite a tus botas o zapatos de cuero.
- Para zapatos o botas de tela, aplica un producto impermeabilizante de silicona recomendado por el fabricante para su mantenimiento.
Cuidar adecuadamente tu equipo de camping no solo asegura que dure más tiempo, sino que también te proporciona la tranquilidad de saber que estará en buen estado cuando lo necesites. Desde la carpa y la mochila, hasta los sacos de dormir y los zapatos, cada pieza de equipo requiere una atención específica para mantener su funcionalidad y rendimiento.
Después de cada viaje, dedicar tiempo a limpiar, secar y reparar tu equipo es una inversión que te ahorrará problemas en futuras aventuras. Siguiendo estos sencillos consejos de Sandiario, puedes estar seguro de que tu equipo estará listo para acompañarte en cada nueva exploración, brindándote comodidad y seguridad en tus experiencias al aire libre.
Recuerda siempre utilizar productos adecuados para el mantenimiento de cada tipo de material y almacenar tu equipo en lugares secos y bien ventilados. De esta manera, tu equipo estará en las mejores condiciones posibles, listo para cualquier aventura que decidas emprender.