Se dan condiciones frías y secas en altitudes elevadas en Europa, América del Norte, Canadá, América del Sur, Asia y África, donde el terreno es rocoso, con nieve y hielo. El rango de temperatura promedio es de -56 ℃ a 18 ℃.
México no solo es conocido por sus playas soleadas y su clima tropical, sino que también cuenta con impresionantes destinos de montaña donde puedes experimentar climas fríos y nevados. Si eres amante del camping y las aventuras en la naturaleza, no puedes dejar de explorar estos lugares. A continuación, Sandiario te presenta algunos de los destinos más destacados en México que ofrecen las condiciones perfectas para disfrutar de la naturaleza en altitudes elevadas:
- Nevado de Toluca: Ubicado en el Estado de México, este volcán es uno de los más altos del país y en invierno puede presentar nieve y temperaturas muy frías.
- Pico de Orizaba (Citlaltépetl): La montaña más alta de México y la tercera más alta de América del Norte, con una cumbre cubierta de nieve y hielo durante todo el año.
- La Malinche: Situada entre los estados de Tlaxcala y Puebla, esta montaña es un destino popular para montañistas y puede tener condiciones frías en su cumbre.
- Iztaccíhuatl y Popocatépetl: Estos dos majestuosos volcanes, ubicados entre los estados de México, Puebla y Morelos, ofrecen climas fríos y nevados, especialmente en las partes más altas.
- Sierra de San Pedro Mártir: En Baja California, esta sierra tiene un clima frío y puede presentar nieve en invierno.
Prepárate para tu próxima aventura en estos increíbles destinos mexicanos, equipándote adecuadamente para enfrentar las bajas temperaturas y disfrutar de la naturaleza en su máximo esplendor.
Sistema en capas
Para lograr una temperatura corporal equilibrada, utiliza un sistema de capas flexible que te permita ponerte o quitarte capas dependiendo de las condiciones climáticas y las actividades.
Primera capa
Esta capa debe ser de chalecos térmicos de manga larga y ropa interior larga de materiales naturales o sintéticos que cubran todas las partes del cuerpo excepto manos y pies. La ropa interior debe ajustarse cómodamente a la piel y no ser tan apretada que restrinja el movimiento. La parte superior e inferior deben superponerse en la cintura para evitar exponer la piel. Para tu primera capa de ropa, lleva al menos un juego de repuesto.
Segunda capa
Elige una camisa térmica de manga larga con botones y pantalones gruesos y duraderos, o un traje de una pieza confeccionado en terciopelo con cuello y puños elásticos para proteger mejor el cuello y las muñecas. Las camisas y los pantalones pueden controlar la temperatura corporal arremangándose las mangas y las perneras, pero no todos los trajes de una pieza tienen esta característica, así que compra el adecuado. La segunda capa de ropa puede estar hecha de materiales sintéticos o naturales. Los beneficios de los materiales naturales son la transpirabilidad y la absorción del sudor. Para algunos suministros que deben mantenerse por encima de los 0 °C, como las brújulas, deben colocarse en los bolsillos de esta capa y abrocharse con botones para facilitar el acceso.
Tercera capa
Si vas de excursión y puedes detenerte para ponerte o quitarte capas si es necesario, opta por un suéter o una chaqueta ligera de cachemira. Sin embargo, si hay algún evento previsto y no conviene cambiarse de ropa, lo mejor es llevar un mono de terciopelo de talle alto con una camisa montañera de terciopelo, o un mono de plumón o de terciopelo. Este tipo de prenda se superpone bien en la cintura, mientras que otras prendas pueden aflojarse con el movimiento. Además, también puede respirar a través de las aberturas del pecho y los hombros, lo que no sólo reduce la pérdida de calor, sino que también alivia las molestias provocadas por la sudoración.
Capa más externa
Esta capa debe ser una chaqueta cortavientos con cremallera y pantalones cubrevientos impermeables, cortavientos y transpirables. Las mangas de la chaqueta deben llegar al dorso de la mano y superponerse a los guantes. La chaqueta también debe tener una capucha grande con una visera de malla que pueda mantenerse en pie en la parte delantera incluso con vientos fuertes. Además, los bolsillos grandes con botones pueden resultar muy útiles.
Suministros
Usa un gorro de terciopelo o una capucha de lana, ambos deben cubrir la cabeza, el cuello y las orejas. Para protección adicional en climas extremadamente fríos, primero ponte una capucha de seda ligera debajo. Al igual que otras partes del cuerpo, tus manos deben protegerse usando varias capas de guantes. En climas fríos, incluso usa tres pares de guantes: el primer par son guantes de seda, el segundo par son manoplas de lana o terciopelo y el tercer par son manoplas a prueba de viento e impermeables, que deben cubrir la segunda capa. Asegúrate de que las manoplas se superpongan con el abrigo.
Zapatos y calcetines
Usa dos pares de calcetines de lana, uno de los cuales debe ser lo suficientemente largo como para subirse y mantener calientes los dobladillos de los pantalones, evitando la exposición de la piel. En cuanto al calzado adecuado, puedes elegir botas de montaña de cuero con botas exteriores aislantes hasta las rodillas o mallas, o elegir botas para la nieve. Asegúrate de que tus zapatos o calcetines no te aprieten demasiado, ya que esto puede afectar la circulación y hacer que tus pies estén más fríos y más susceptibles a la congelación.
Explorar los majestuosos paisajes montañosos de México y enfrentarse a sus climas fríos puede ser una experiencia inolvidable y desafiante. Lugares como el Nevado de Toluca, el Pico de Orizaba, La Malinche, Iztaccíhuatl y Popocatépetl, y la Sierra de San Pedro Mártir, ofrecen escenarios impresionantes y condiciones ideales para el camping y el montañismo.
Para disfrutar plenamente de estas aventuras, es crucial estar bien preparado. Utiliza un sistema de capas adecuado, protege tu cuerpo con ropa térmica y resistente al viento, y lleva el equipo necesario para enfrentar las bajas temperaturas. Siguiendo los consejos de Sandiario, no solo te mantendrás abrigado y seguro, sino que también podrás apreciar la belleza y la serenidad de estos entornos únicos.
Así que, si eres un amante de la naturaleza y buscas nuevas aventuras, no dudes en visitar estos increíbles destinos. La naturaleza fría y majestuosa de las montañas mexicanas te espera para brindarte experiencias inolvidables y paisajes que te dejarán sin aliento. ¡Prepárate, equipa tu mochila y lánzate a la aventura!