Estás disfrutando de la playa, nadando a gusto, cuando de repente… ¡zas! Sientes una quemazón horrible en la piel. Lo más probable: una medusa te picó. Aunque muchas veces no pasa de un susto, hay casos donde puede ser más grave. Aquí en Sandiario te cuento qué hacer si te pica una medusa, cómo darte los primeros auxilios y cuándo es mejor ir al hospital. Porque sí, hasta en el mar hay que saber reaccionar rápido.
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Las medusas, también conocidas como aguamalas o aguavivas, tienen unos tentáculos debajo de su campana en forma de paraguas. Estos tentáculos están llenos de células urticantes que inyectan veneno al contacto. Cuando una medusa te pica, ese veneno entra en tu cuerpo y puede causar una reacción alérgica.
Dependiendo del tipo de medusa y de tu sensibilidad, la reacción puede ir de leve a grave. En los casos más leves, sientes un dolor parecido a una descarga eléctrica y te salen ronchas rojas en la piel, con picazón. Pero si eres alérgico o te tocó una especie más peligrosa, puede que te salgan ampollas o moretones grandes, acompañados de un dolor intenso, comezón fuerte e hinchazón.
En los casos graves, el veneno se puede esparcir por todo el cuerpo. Ahí sí se pone feo: podrías tener dolor de cabeza, mareos, calambres, entumecimiento, presión alta, dolor en las articulaciones, náuseas, diarrea, dificultad para tragar o hasta fallas en los riñones. En situaciones extremas, la persona puede entrar en shock y morir.
Si notas que te picó una medusa, lo primero es no rascarte ni tocar la zona afectada. Sal del agua lo antes posible y busca ayuda. Lava la herida suavemente con agua de mar o con alguna solución alcalina que tengas a la mano (como agua con bicarbonato de sodio o alumbre). No uses agua dulce, porque puede activar más veneno que haya quedado en la piel.
También puedes tallar con agua de mar con arena o lavar con agua jabonosa. Luego, retira con cuidado cualquier resto de tentáculo que haya quedado en la piel y mete la zona afectada en agua tibia. No uses hielo, ni frotes con una toalla. Después aplica vinagre (ácido acético) o una loción de calamina hasta que el dolor se quite.
Si tú vas a ayudar a alguien, ponte guantes para no picarte tú también.
Si la persona empieza a tener problemas para respirar, haz que se siente con las piernas colgando y asegúrate de que tenga libres la boca y la nariz para que respire bien, mientras buscas ayuda médica urgente.
Si la picadura fue en la boca, enjuágate continuamente. Si fue en los ojos, ahí sí puedes usar agua dulce para enjuagar.
Para evitar complicaciones, lo mejor es que vayas al hospital lo antes posible. Ahí te pueden hacer estudios para identificar el tipo de medusa que te picó y darte el tratamiento adecuado.
Las picaduras de medusa no son cosa de juego. Aunque algunas solo causan molestias leves, otras pueden ponerte en peligro serio si no actúas rápido. Lo más importante es no entrar en pánico, evitar hacer cosas que empeoren la herida (como usar agua dulce o rascarte) y buscar atención médica si los síntomas se salen de control. Así que ya sabes: si te vas al mar, prepárate también para lo inesperado.
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